En cosmética, un sérum se considera un producto de cuidado facial con las siguientes características:
Alta concentración de activos: Los sérums contienen una mayor concentración de ingredientes activos que las cremas hidratantes tradicionales, lo que les permite actuar de forma más específica y potente sobre problemas concretos de la piel.
Textura ligera: Suelen tener una textura fluida y ligera, que se absorbe rápidamente en la piel sin dejar sensación grasa. Esto permite que los activos penetren en las capas más profundas de la piel.
Complemento a la rutina facial: Los sérums no sustituyen a la crema hidratante, sino que la complementan, proporcionando un tratamiento adicional con ingredientes específicos para necesidades concretas, como antienvejecimiento, hidratación profunda, luminosidad, etc.
Aplicación antes de la crema: Se aplican después de la limpieza y el tónico, y antes de la crema hidratante, para que los activos penetren mejor en la piel.
En resumen, un sérum es un producto cosmético concentrado y de rápida absorción, diseñado para tratar problemas específicos de la piel y potenciar los resultados de la rutina facial.
En el ámbito de la cosmética, comedogénico se refiere a la capacidad de un ingrediente o producto para obstruir los poros de la piel. Esta obstrucción puede provocar la formación de comedones, que son pequeñas protuberancias en la piel que pueden ser blancas (puntos blancos) o negras (puntos negros). Los comedones son el primer paso en el desarrollo del acné.
Un tónico facial es un producto líquido que se aplica después de la limpieza y antes del sérum y la crema hidratante. Sus funciones principales son:
Equilibrar el pH de la piel: Después de la limpieza, el pH de la piel puede verse alterado. El tónico ayuda a restaurarlo a su nivel óptimo, lo que favorece la función barrera y la salud de la piel.
Eliminar los restos de impurezas: El tónico puede ayudar a eliminar cualquier residuo de maquillaje o limpiador que haya quedado en la piel.
Preparar la piel para los tratamientos posteriores: Ayuda a que los sérums y cremas se absorban mejor.
Aportar beneficios específicos: Existen tónicos con ingredientes específicos para hidratar, calmar, exfoliar o controlar el exceso de grasa, según las necesidades de cada piel.
Aunque ambos productos hidratan la piel, existen algunas diferencias clave:
Textura: Los sérums suelen tener una textura más ligera y fluida que las cremas hidratantes, lo que permite que penetren más fácilmente en la piel.
Concentración de ingredientes: Los sérums suelen contener una mayor concentración de ingredientes activos, lo que los hace más efectivos para tratar problemas específicos.
Función: Los sérums se utilizan para tratar problemas específicos, como arrugas, manchas o falta de luminosidad. Las cremas hidratantes se utilizan para hidratar y proteger la piel.
Orden de aplicación: El sérum se aplica antes de la crema hidratante.
La piel sensible se caracteriza por ser más reactiva a los estímulos externos, como los cambios de temperatura, los productos cosméticos o la contaminación. Suele presentar síntomas como enrojecimiento, picor, sequedad o irritación.
Para cuidar la piel sensible, es importante:
Utilizar productos suaves y sin fragancia: Evita productos con ingredientes irritantes como sulfatos, alcohol o fragancias.
Hidratar la piel a diario: Utiliza una crema hidratante suave y específica para pieles sensibles.
Proteger la piel del sol: Usa protector solar a diario, incluso en días nublados.
Evitar la exfoliación agresiva: Opta por exfoliantes suaves y utilízalos con moderación.
Realizar una prueba de parche: Antes de usar un nuevo producto, aplícalo en una pequeña zona de la piel para comprobar si causa alguna reacción.
¿Qué es AHA y para qué sirve?
Los AHA (alfa-hidroxiácidos) son ácidos orgánicos que exfolian la piel, eliminando las células muertas y revelando una piel más suave y luminosa. Estimulan la renovación celular, reducen arrugas, unifican el tono y mejoran la absorción de otros productos. Los AHA más comunes son el ácido glicólico (derivado de la caña de azúcar) y el ácido láctico (derivado de la leche). Es importante usar protector solar al usar AHA, ya que pueden aumentar la sensibilidad al sol.